Cuando el régimen nacionalsocialista de Hitler estaba el borde del colapso, y las gloriosas tropas de Zukov sitiaban Berlín, el enemigo desesperado se lanzó en una orgía autodestructiva; allí la famosa orden Nerón, destruir Alemania, cosa de que si ellos perdían entonces no habría futuro para nadie. Hoy, los herederos del Fhurer, los sionistas, han demostrado abiertamente al mundo que poseen armas de destrucción masiva, y que planean utilizarlas contra población civil desarmada. 
El ministro sionista de ultraderecha, Amichai Eliyahu, ha propuesto el lanzamiento de una bomba atómica contra la Franja de Gaza. “Esa es una de las posibilidades”, afirmó a una radio militar. 
Las declaraciones de Eliyahu son conocidas en el régimen. En el cargo desde 2018, en octubre de 2022 planteó abiertamente la anexión directa del territorio ocupado de Cisjordania, y anteriormente había planteado la ocupación total de Palestina, negando explícitamente los derechos civiles de todo tipo a los palestinos
Cuando estas son las declaraciones de un mero desquiciado la solución es sencilla, simplemente se le ingresa en una casa de orates. Sin embargo, Tel Aviv posee armas nucleares, por lo que este brutal canalla debe ser tomado en serio. 
Si bien oficialmente lo han negado, hace 50 años que la entidad sionista posee armas nucleares. Sin embargo, su programa de armas de destrucción masiva ha contado con el respaldo de EE.UU, lo que le ha evitado las sanciones de Corea del Norte, o la guerra de invasión lanzada contra Irak, aunque en esa ocasión las supuestas "armas de destrucción masiva" solo fueron un invento de EE.UU. 


Luis Muñoz 
Secretario General del Partido de la Unidad Nacional